INTERNACIONALES
21 de agosto de 2025
Detuvieron en Italia a un sospechoso clave del sabotaje a los gasoductos Nord Stream en el mar Báltico

El hombre de nacionalidad ucraniana será extraditado a Alemania para enfrentar cargos relacionados con el ataque que afectó el suministro de gas ruso y desató una crisis energética en Europa
De acuerdo con la fiscalía federal, Serhii K. habría formado parte de un grupo que usó un yate alquilado en Alemania para llegar al área de los gasoductos, valiéndose de documentos de identidad falsificados gestionados mediante intermediarios. El grupo viajó desde Rostock, en la costa noreste de Alemania, hasta el mar Báltico, donde se sospecha que colocaron los explosivos que provocaron graves daños a la infraestructura energética. La policía italiana indicó que el sospechoso será entregado a la justicia alemana para enfrentar cargos de colusión para provocar una explosión, sabotaje anticonstitucional y destrucción de edificios.
La investigación sobre el ataque al Nord Stream ha sido objeto de múltiples hipótesis que involucran a diferentes actores internacionales. Rusia acusó a Estados Unidos de estar detrás de los ataques, citando declaraciones de funcionarios estadounidenses y revistas previas sobre la oposición de Washington al proyecto. Por su parte, gobiernos occidentales también han señalado la posibilidad de que Rusia estuviera detrás del ataque como estrategia para intimidar a Europa y aumentar la presión energética. El gobierno ruso ha rechazado estas acusaciones con la misma contundencia. Medios como The New York Times, Der Spiegel y The Washington Post difundieron en 2023 que un grupo proucraniano podría haber llevado a cabo el sabotaje de forma autónoma, mencionando a Roman Chervinsky como coordinador del ataque, aunque se afirmó que actuó sin conocimiento del presidente Volodymyr Zelensky. El gobierno ucraniano niega cualquier implicación y calificó tales versiones como intentos de desinformar y generar discordia entre sus aliados.El sabotaje contra los gasoductos provocó una escalada de la crisis de suministro energético en Europa al dejar inservible el Nord Stream 1, principal ruta de gas ruso a Alemania hasta la suspensión previa por parte de Moscú en agosto de 2022. El Nord Stream 2 también sufrió daños y nunca entró en funcionamiento tras quedar suspendido su proceso de certificación por el gobierno alemán a raíz de la invasión rusa de Ucrania.
El caso tuvo repercusión internacional, llegando al Consejo de Seguridad de la ONU, donde se discutió sin acuerdo una propuesta rusa para crear una investigación independiente. El Parlamento Europeo también exigió pesquisas imparciales. El impacto del ataque evidenció la vulnerabilidad de la infraestructura energética europea y acrecentó la desconfianza entre Rusia, Estados Unidos y la Unión Europea.